viernes, 15 de julio de 2011

Re-ac-tor

Si de algo dista Neil Young es de esa figura del viejo roquero (bochornosa expresión per se) dormido en los laureles que vive de las rentas (económicas y/o artísticas) dando una imagen patética de sí mismo y de su profesión. Inquieto por naturaleza, rebelde sin pausa (que diría Public Enemy), Young, sin querer pasar por eternamente joven, no se instala en lo conocido,  no renuncia a la investigación y no parece preocuparle el desconcierto que pueda causar. Es por ello que por mucho que critiquemos su obra en los años ochenta no deja de ser el riesgo de un artista integro, auténtico, que hace lo que le viene en gana, y no lo que a otros les pueda apetecer.

Recibido sin mucha alegría —algo a lo que tendrá que acostumbrarse el canadiense hasta 1989 y Freedom—Re-ac-tor (1981) es quizá el disco más cercano al punk (el rojo y negro anarcosindicalista de la portada) y al high energy de todos los que ha grabado Neil Young, aunque nunca han estado lejos de Stooges y MC5 sus planteamientos. No es aquí la electricidad extática, como en Zuma o Everybody Knows This Is Nowhere, ni hay nada en el disco del carácter elegíaco de On The Beach, pero al menos no se dedica Young a hacer música para adolescentes estúpidos o profesionales liberales que buscan desconectar un rato. "You were born to rock / You'll never be an opera star" canta salvaje en Op-er-a Star acompañado por Crazy Horse —como en el resto del elepé, que no se nos olvide—. Rock duro sin concesiones es también lo que sigue en Surf-er Joe And Moe The Sleaze y los nueve minutos de T-Bone, que convierte al metal que triunfaba por aquel entonces en chicle de fresa, si me admiten el símil. Get Back On It relaja el ambiente al final de la primera cara, a pesar de que el piano trotón no tenga el suficiente protagonismo como para rebajar la aspereza del sonido de Young y sus caballos locos. También crudos pero accesibles se presentan South-ern Pac-i-fic y Mo-tor Cit-y, los dos primeros cortes del la segunda cara. Rap-id Tran-sit me parece la canción más floja del álbum, sin ser mala, aunque sea redimida por Shots, cuya épica tronadora no desencajaría en Rust Never Sleeps. Llega así a su fin un disco que, sin ser una obra maestra, mantenía intacta la dignidad artística de Neil Young aun rebajando las cotas de su creatividad. Dignidad que no perderá en los años siguientes, se piense lo que se piense de lo que algunos consideran "experimentos" (no niego que lo sean) que comienzan con Trans. Siempre en los antípodas de tanta medianía y del viejo roquero del primer párrafo, eso es lo que diferencia a Neil Young —tanto obras mayores como menores son inseparables, asfaltando una misma vía— y le hace, como a Bob Dylan, Lou Reed o David Bowie, músico insustituible, verdad frente a mentira. Incluido Re-ac-tor.

13 comentarios:

  1. Pedazo de disco Don Gonzalo, a mi me parece que Neil Jóven es de los que seguía haciendo lo que quería a pesar de lo que hiciesen otros en los años 80, como dices mantuvo su dignidad con discos como este y Trans, que me parecen cojonudos. Algunos cayeron en la influencia ochentera y perdieron calidad, pero él no, suguió en sus 13.
    Saludos.

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  2. He escuchado éste -demonizadísimo- LP, y no me parece tan malo como a sus detractores, aunque tampoco me lo he puesto mucho desde entonces, a decir verdad. Recuerdo que la que más me gustó fue "Shots".

    Por cierto lo que dices del periplo Neil Young 80's es perfectamente aplicable al trabajo de Dylan en esa década, estigmatizado por muchos, pero con discos tan punteros como "Infidels", "Empire Burlesque" o "Oh Mercy".

    Rock On!

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  3. A mi este disco siempre me gusto, al igual que otros experimentos de Young como "This Note's for You"
    El tema Southern Pacific me encanta!
    saludos

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  4. Cierto, no es tan malo como siempre se escuchó decir (muchísimo peor es "Landing on water", por ejemplo), pero yo lo pondría a distancia de un "Hawk and Doves", aunque estoy seguro que estos tipos pueden hacer revivir en directo estas canciones y hacerlas mucho más brillantes de como las grabaron. Donde quiero llegar es que los temas son muy buenos, pero me suenan poco "profundos", poco trabajados, muy del tirón (seguro que fue premeditado). Ya que estamos, reivindico "Comes a time", vaya lo olvidado que lo tiene la gente.
    Cheers!

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  5. No es el disco de Neil Young que más me pongo en casa pero desde luego que no es nada desdeñable...un ensayo para "Ragged Glory"?

    Saludos!

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  6. ..neil young me es un tanto desconocido salvo por trabajos como ragged glory que me lo dio a conocer soyde, le noise que me lo dio a conocer werty y crystal ball que lo conoci por el trabajo de pearl jam, todos ellos me parecieron discazos. En cuanto a este dices que esta inserto en una epoca de busqueda mas que de foco, y aun asi es bueno, por ende...ha buscarlo se ha dicho..

    paz, gonzalo

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  7. me corrijoo era mirror ball...quien sabe en que estaba pensando..jaja!! saludos

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  8. Pues este es uno de los discos de Young que no tengo y que no he escuchado nunca (en realidad ninguno de los 80 excepto el Freedom). Y desde luego no tenía ni idea de que era tan "punk". De haberlo sabido seguramente ya me lo habría comprado.
    Un abrazo.

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  9. Creo que el "Reactor" es el gran desconocido por el hecho de publicarse cuando el Tio Neil andaba algo perdido en los 80...pero es totalmente recomendable ya solo por "Shots". Trallazos electricos sin concesiones; quizas de lo más fuerte de Young y un camino que remataria con el excepcional "Ragged Glory".
    para disfrutar en cada escucha.
    PD: no conocia el blog, pero me haré adicto ya solo por el titulo.Saludos

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  10. Yo de tito Neil conozco poco: Harvest, Ragged Glory, Freedom, y Comes a Time. He intentado sumar a la lista Re-ac-tor y... que va, que va.

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  11. A mí su producción de los ochenta me parece irregular, Savoy, pero tan Young como cualquiera de sus etapas. Siguió en sus trece, así es.

    Dylan y Young, Tyla, van en paralelo en muchas cosas. "Shots" quizá sea también mi favorita del álbum.

    "This Note´s For You" es muy disfrutable, Tsi-Na-Pah.

    Scott, yo "Re-ac-tor" lo pongo en su sitio, ni tanto ni tan calvo. No es "Ragged Glory", pero es un buen disco. Nos sumamamo a tu reivindicación de "Comes A Time".

    Agente: "Ragged Glory" fue el primer disco que reseñé en el blog, allá por 2008.

    Panxo, hay mucho y bueno de Neiler. Prueba con "Weld" si quieres exceso, o con "After The Gold Rush" para lo contrario. Esos lapsus, ja ja ja.

    Yo creo que merece la pena, Lou, por eso lo he reseñado, aunque "Freedom" es mucho mejor.

    Me paso por tu blog, Xan. Sí, "Shots" es un temazo.

    Bueno, Dani, no pasa nada. Los cuatro que citas dan para mucho.

    Saludos a todos.

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  12. Aún he leído hoy los comentarios, que conste que con lo del ensayo no me refería a que escribieras un post sobre el Ragged Glory sino que el REactor podía ser considerado como un "ensayo" del susodicho.
    Ya sé que es una tontería pero para que no pienses que quería convertir tu blog en un buzón de peticiones.

    Un saludo.

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  13. No pasa nada, Agente. Fui yo el que intepretó mal tus palabras.

    Saludos.

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