El tópico "vuelta a las raíces" —utilizado sin ton ni son en miles de ocasiones— parece cabal aplicado al Death Magnetic (2008) de Metallica. Sin entrar a valorar el discutible periodo de Bob Rock, es evidente que con Rick Rubin a los controles en lugar de Rock el grupo estadounidense retoma sonido y maneras similares a los de su primera época, la encuadrada en la década de 1980 y coronada por el colosal …And Justice For All. Sin llegar al nivel de éste, Ride The Lightning o Master Of Puppets —algo que habría resultado difícil—, James Hetfield, Kirk Hammett, Lars Ulrich y Robert Trujillo (en su primer disco como bajista del cuarteto) ponen en pie desde la inicial That Was Just Your Life el agresivo y poderoso cruce de heavy y trash metal, asumiendo características de ambos subgéneros, que dio lugar a su etapa dorada. Es innegable de todos modos, conforme avanza el álbum y escuchamos temas como The Day That Never Comes o The Unforgiven III, que la banda no es la misma y que la música más comercial o melódica practicada en los noventa ha quedado parcialmente incrustada en su ADN. Sin embargo, cañonazos espasmódicos como All Nightmare Long y My Apocalypse o no tan excesivos pero tremendos como The End Of The Line y The Judas Kiss sacan la bestia ochentera a la luz y nos hacen recuperar la fe en un grupo, Metallica, que cuando lo hace bien, y en lo suyo, apenas tiene rivales. Para lo que no estaba uno preparado, eso sí, era para el extraordinario Lulu que llegaría tres años después en compañía de Lou Reed. Aunque ésa sea otra historia de la que aquí ya hayamos hablado.
Ya sabes de mi asignatura metállica pendiente. Lo mismo me ocurría con gente como Mötorhead y AC/DC y leyendo tus textos (algunos antiguos de grato recuerdo) uno se fue convirtiendo, si no en fan absoluto, en aficionado atento.
ResponderEliminarHace tiempo me recomendaste el "And Justice For All" como obra cumbre de los americanos. Espero que la próxima vez que nos veamos ya esté zanjado el asunto.
Abrazo,
Nos vemos lo antes posible y hablamos de ese y otros discos de Metallica.
ResponderEliminarUn abrazo, Javier.
Son discos potentes que ponen de manifiesto el momento pleno de una banda. Sin llegar a ser su esplendor, los demuestra con la experiencia y el timing justo.
ResponderEliminarAprovecho para repasarlo.
Abrazos Gonza!
Sí, recuperando sensaciones, Frodo. Que lo disfrutes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tengo esta álbum y me gustó la vuelta a las raíces
ResponderEliminarIgualmente como ves, Klaus.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.