lunes, 26 de febrero de 2018
Dead By Christmas
Los hay con más temas y también recomendables (el doble CD Decadent Dangerours Delicious, por ejemplo), pero de los recopilatorios de la primera etapa de Hanoi Rocks, por contenido y presentación, Dead By Christmas —vinilo doble de 1986 publicado por la casa francesa Raw Power— me parece idóneo para introducirse en la música de la banda. Pocos defendieron el rock and roll en la primera mitad de los ochenta como los finlandeses, recogiendo los riffs, la actitud, el sonido y la potencia del high energy, el punk, el glam rock y el power pop. Y al decir pocos no me refiero solamente a la calidad de su propuesta, que también, sino a que casi nadie se parecía a ellos. De las veintiún canciones reunidas, seis son en vivo, y no hay más que escuchar las dos que abren el primer disco (Oriental Beat y Back To Mistery City) y las dos que cierran el segundo (el Under My Wheels de Alice Cooper y el 1970 de los Stooges, aquí llamado I Feel Alright) para saber del influjo de Detroit en un grupo que sobre las tablas mordía. En los temas del quinteto, mayoritariamente escritos por Andy McCoy en solitario, se aprecia muy bien ese cruce de guitarrazos y bases rítmicas fuertes con el pop de la nueva ola británica y estadounidense, marca de la banda encabezada por Michael Monroe; o sea, perteneciendo a su tiempo pero sin sonar exactamente a él o encorsetarse. Es así que es capaz, además, de transformar tajantemente el Lightning Bar Blues de Hoyt Axton, original country que se hace hanoi rock por arte de birlibirloque, o de entregarnos un Malibu Beach (Calypso) que es lo que parte del título anuncia entre paréntesis. Ramones, Dictators, The Clash, T. Rex, Blondie, The Beat, Cheap Trick o los arriba mentados se pasean en fenomenales composiciones tales que Mental Beat, Taxi Driver, Tragedy, Visitor, Dead By X-Mas (el Runaway de Bon Jovi con el porcentaje de horterada reducido) o Lost In The City, que sirven por igual de homenaje a sus ídolos que como declaración de su personalidad. En fin, que si no les apetece o no tienen tiempo de disfrutar de todos los elepés de los autores de Bangkok Shocks, Saigon Shakes, Hanoi Rocks, escuchen esta compilación y se harán una muy buena idea de quiénes eran estas fieras del norte de Europa cargadas de melodía.
Pues me lo busco, no conozco al grupo y si dices que es el disco idóneo para adentrarse en su onda, pues no se hable más.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y al loro también, Addi, con la carrera en solitario de Michael Monroe.
ResponderEliminarUn abrazo.
yo tenco el otro rec y de monroe anda por ahi baratito un 2cd del año pasado q es ideal recopilacion. Sobre los hanoi pues poco q decir basta escuchar sus lps
ResponderEliminarLa recopilación de Monroe no la conocía, Bernardo, pero he echado un vistazo y tiene muy buenas canciones. A los Hanoi Rocks lo que hay que hacer es recuperarlos.
ResponderEliminarAbrazos.
Sabido es mi patinaje artístico más arriba de las landas germanas, un par de referencias suecas (Nomads y Hellacopters) y pare Ud. de contar. Estos recopilatorios, como bien dices, tienen la virtud de servir de guía para el neófito, así que aprovecharé la recomendación.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Bueno, ya te has hecho una idea de qué pie cojean estos finlandeses. Ya que mencionas a dos grandes grupos suecos, no olvides probar con Union Carbide Productions y los Creeps, high energy y garage rock de primera división.
ResponderEliminarAbrazos.