jueves, 19 de diciembre de 2019
Can Soundtracks
"Can Soundtracks es el segundo álbum de Can pero no el álbum número 2. Can Soundatracks hace referencia a una selección de canciones y bandas sonoras de las últimas cinco películas para las cuales The Can escribió la música. El álbum número 2 será publicado a comienzos de 1971." Este breve texto impreso en la contraportada de Can Soundtracks ayuda a comprender su naturaleza, aunque el pragmatismo nos haga hablar de él como el segundo elepé de Can, puente entre un excelente debut (Monster Movie) y una de las más grandes y personales obras maestras de la historia del rock (Tago Mago). Puente —sí— forzado por la compañía discográfica y con la presencia en dos de los siete temas de un Malcolm Mooney que ya no es parte del quinteto, pero que contiene una de las canciones definitivas de los autores de Future Days: Mother Sky.
Puesto a la venta en 1970, Soundtracks significa el debut de Damo Suzuki en la banda formada en Colonia, cuyos tres años al frente de la misma devendrán el periodo esencial del más importante de los grupos etiquetados como kraut. Y no solo eso, pues su obra ha de situarse estrictamente al nivel de la de —buceemos por diferentes terrenos— Frank Zappa. la Velvet Underground, los Beach Boys, Love, Charles Mingus, Howlin' Wolf o Camarón de la Isla. La primera cara del trabajo trae tres temas de Deadlock, film de culto teutón. Homónimo, el primero es rock ácido de querencia épica registrada en la guitarra de Michael Karoli. Tango Whyskyman podríamos describirlo como pop y funk progresivos, ejemplo notable, en todo caso, de la faceta menos extrema de Can, ésa que no renuncia a su estilo —liderado por la percusión de Jaki Liebezeit— pero se muestra más accesible. Pieza breve, la versión instrumental de Deadlock es seguida de Don't Turn The Light On, Leave Me Alone, crescendo de origen funk y velvetiano para la película Cream que se adivina borrador de futuras composiciones. Soul Desert es un corte de rock tenso e hipnótico cantado por la garganta quebrada de Mooney e integrado en Mädcehn mit Gewalt.
Accionista mayoritaria de la misma, la segunda cara es acaparada por Mother Sky (banda sonora de Deep End), tour de force emparentado con los de Yoo Doo Right, Halleluhwah o Bel Air, aunque la proporción de hard rock —dictaminada por la guitarra solista de Karoli— sea mayor aquí. Sobre la base rítmica indispensable de Holger Czukay y Jaki Liebezeit, la voz de Damo Suzki, los teclados de Irmin Schmidt y las seis cuerdas Michael Karoli van haciendo sus aportaciones y dibujando el sonido inconfundible —libre, psicodélico, audaz— de Can. En comparación con los casi quince minutos y la intensidad de Mother Sky, los cuatro de jazz vocal de She Brings The Rain (segunda canción con Mooney) grabados para Bottom pueden parecer poca cosa; sin embargo, el radical contraste que supone (Czukay al contrabajo, Karoli al violín en un fragmento, la diáfana y relajada interpretación de Mooney, la ausencia de percusión) y la ligera modificación que sufre al final, al añadir Karoli electricidad al asunto, hacen de la composición que cierra Can Soundtracks una delicia. Disco de transición, Tago Mago a la vuelta de la esquina y lo que se quiera: un placer para mis oídos que se eleva por encima de la mayoría de plásticos paridos en lo que llevamos de siglo. Y no solo por Mother Sky.
Muy interesante el nexo que comentas entre "Mother Sky" (el mejor tema del álbum) con otros no menos admirables de la primera obra de Can ("Yoo Doo Right" y, sobre todo, "Halleluhwah". El "Bel Air", aunque anunciado en los créditos del "Future Days" es sustituido en la galleta por un extraño "Spare a Light", cosas extrañas...)Estoy escuchando el disco ahora, después de 9 meses, cuando me sumergí en una super-sesión kraut para entonarme con la entrada que entonces hize del "Tago". Suena francamente bien, queda dicho. Y cada vez me reafirmo más en la idea de Jaki Leibezeit como uno de los mejores baterías de la historia reciente.
ResponderEliminarAbrazos,
No entiendo lo que dices, Javier, ¿en tu copia del elepé no está "Bel Air" y es sustituida por un tema llamado "Spare A Light? ¿No será el mismo corte de veinte minutos con otro nombre? Sí, el disco suena muy bien, no es "Tago Mago" pero tiene cosas espléndidas, especialmente, claro, "Mother Sky". Liebezeit es un baterista extraordinario, totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarAbrazos, maestro.
Pues eso, que en los créditos de mi Lp aparece "Bel Air" como última canción de la cara B, mientras que en la galleta es otro el título ("Spare a Light") que le dan. Me imagino que se tratará de la misma pieza.
EliminarAbrazos,
Aclarado. Es la misma pieza seguro. Abrazos.
ResponderEliminarJaki Leibezeit vivió una temporada en Barcelona y tocó con Tete Montoliu.
ResponderEliminarLo he escuchado decir a personas cercanas a Tete pero no lo he visto escrito en ninguna parte ni tengo constancia de registro alguno. ¿A vosotros os suena algo de esto?
Así es, Víctor. En el libro "All Gates Open", la biografía de Can, se dice que Leibezeit vivió en Barcelona en la primera mitad de los años sesenta y tocó en el grupo de Montoliu. Lo que no sé es si llegaron a registrar algo en el estudio o si hay alguna grabación en vivo de dicho grupo. Voy a investigar y si me entero de algo te dejo otro comentario.
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por pasarte.