Su breve estancia en el planeta no fue obstáculo para dejar un legado sobre el que crecería el mejor pop y rock de todos los tiempos, el de los Beatles, los Stones y Bob Dylan. Hablamos, claro, de Buddy Holly y, en concreto, de su debut discográfico al frente de los Crickets, publicado a finales de 1957, doce piezas en menos de media hora entre las que están las míticas Not Fade Away (o Bo Diddley en clave blanca), Maybe Baby y That'll Be The Day. Pero no hay desperdicio alguno en el elegante cabalgar de The "Chirping" Crickets: la voz y la guitarra de Holly, las seis cuerdas de Niki Sullivan, la batería de Jerry Allison y el contrabajo de Joe B. Mauldin (más los coros de los Picks) se mueven con exactitud y emoción en la canción de dos minutos, construyendo con material propio y ajeno el rock and roll y su futuro. Rockabilly, country y doo-wop conforman un elepé cuya influencia, prestancia y sobriedad lo sitúan junto a los mejores logros de Chuck Berry, Eddie Cochran o Little Richard. Un trozo de cielo hecho música que ningún melómano de bien debe despreciar.
Me interesa ese disco que desconozco, pero con tu nota me lo tengo que anotar. De ese cantante solo sé que murió en el famoso accidente de aviación donde murieron otras dos luminarias musicales que hizo acuñar la frase "El día que murió la música"
ResponderEliminarAsí es, Alí, murió junto con Ritchie Valens y The Big Bopper. El disco que comento es esencial.
ResponderEliminarUn abrazo.
Exacto mi hermano. De Valens llegué a postear algo
Eliminarhttp://tigrero-literario.blogspot.com/2015/06/la-primera-cancion-en-espanol-que-logro.html
Pues a tu blog que voy a leerlo, Alí.
EliminarAndo estos día dándole un repaso a Gene Vincent y sus Blue Caps, primos hermanos ingleses del gran Buddy. ¿Qué nos hubiera deparado la historia sin la temprana desaparición del genial artista americano?
ResponderEliminarViene muy bien repasar las obras de los grandes maestros, de los precursores, aquellos que, como dicen los ingleses, "paved the way". Cada vez que los escucho saco la conclusión de que son incomparables, únicos, hasta su sonido, muchas veces, me parece mejor que el de los artistas modernos, y mira si ha evolucionado la técnica de grabación.
Abrazos,
Por cierto..., ¿quienes son los chicos de la nueva imagen?
ResponderEliminarGene Vincent y sus Blue Caps son también geniales, aunque lo de ingleses lo dices por lo de su traslado a aquel país, ¿no? Te lo digo porque sus dos primeros y eternos elepés son estadounidenses, al igual que Vincent y Cliff Gallup. Totalmente de acuerdo con lo de las obras de los grandes maestros, Javier, incluido lo del sonido, las técnicas eran más primitivas pero las utilizaban de una manera extraordinaria para dar con su sello. Y la nueva imagen está protagonizad por un dúo que te gusta mucho: Neu!
ResponderEliminarAbrazos.
La influencia de Holly no siempre se pone en la oportuna medida, los principios de The Beatles tienen en Holly y sus Crickets un espejo en el que se miraron, y como bien dices no fueron los únicos.
ResponderEliminarNo tengo el disco más que en descarga, pero es una auténtica gozada.
Y además la portada es mundial.
Un abrazo.
Merece compra física, Jorge, en mi caso lo tengo en CD. Menuda portada, sí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un legado inmenso e indispensable el de Buddy Holly. Abrazos.
ResponderEliminarTotalmente, Juanjo, nunca me canso de su música.
ResponderEliminarAbrazos.