lunes, 2 de septiembre de 2013
On The Quiet
Aproximación pausada a varios de su clásicos eléctricos, On The Quiet (1996) es una curiosidad que nos muestra la faceta (semi) acústica de uno de los mejores bandas australianas si de high energy rock and roll hablamos: los Celibate Rifles. Las versiones originales no son mejoradas, sí llevadas a un terreno más tranquilo en el que se degustan de una manera diferente, en especial las letras que salen de las graves cuerdas vocales de Damien Lovelock, quien cobra especial protagonismo al eliminar voltios las guitarras. Sentinel, This Gift, No Sign o Jesus On TV —de todas las maneras— siguen siendo grandes canciones, tratadas por sus propietarios con el mismo esmero que cuando las registraban para discos tan inolvidables como The Turgid Miasma Of Existence, Roman Beach Party, o Spaceman In A Satin Suit. Sin embargo, y por si hay quejas y para que nadie se sienta defraudado, la banda de Kent Steedman realiza en el último tercio del trabajo cuatro macanudas y consecutivas lecturas —con el amplificador encendido— de los Sports, Rose Tattoo, los Sunsets y los Lisptick Killers, compatriotas todos ellos de los Rifles. Así, Boys (What Did The Detectives [sic] Say?), Astra Wally, Hot Generation e Hindu Gods Of Love retoman la "pasión por el ruido", que diría Barricada, de nuestro grupo, nos levantan del asiento y hacen patria al mismo tiempo. Se puede vivir sin On The Quiet (no sin los Celibate Rifles, ¡que conste!), en fin, pero cuando se escucha gusta bastante. Por si tropiezan con él, ahí queda eso.
Desconocidos por mi, tendré que darles una oportunidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Oí hablar de ellos en su tiempo pero no tengo nada suyo, y eso que ese rock australiano de la época me gusta mucho (Hoodoo Gurus, Radio Birdman, Beasts of Bourbon, Tell Tale Hearts y otros muchos) Bueno, intentaré paliarlo.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
A ver si te paso algo, querido Savoy.
ResponderEliminarSi te gustan los grupos que citas (a los Tell Tale no los he oído), los Celibate Rifles también serán de tu agrado, Javier.
Abrazos.
Fallo mío. Tell-Tale Hearts son de la zona de San Diego, nada que ver con Australia, no se por que los mencioné. Los que sí incluyo ahora son The Spikes, aussies auténticos y muy recomendables.
EliminarAbrazo,
JdG
Ok, me apunto a los Spikes. Gracias.
EliminarNi idea, pero si proceden de Australia habrá que poner la oreja. Gracias por la recomendación!
ResponderEliminarSaludos!
De Sonny Stitt a Deep Purple, de un disco como Transformer del que hasta los niños saben canturrear "Walk on the wild side" a esta obra ignota... puro Ragged Glory je je je. Me apunto a lo dicho arriba: si son de los antípodas merecerán una escucha.
ResponderEliminarAbrazos
¿Ves? uno cree que sabia y de esta gente sólo conocia el nombre, me hace gracia. Así que gracias por darme pistas sobre su sonido
ResponderEliminarDe nada, Rockland, espero que los Rifles sean de tu agrado.
ResponderEliminarNo lo puedo evitar, Agente, raro que es uno, je je je. Si te gusta Radio Birdman, digamos, los Rifles no te decepcionarán.
No llegamos a todo, TwoHeads, hay demasiado. Gracias a ti por pasarte.
Abrazos para los tres.
De esta música estoy bastante pez. Habrá que ponerle solución.
ResponderEliminarBuen post. Un abrazo!
Pues a mí me parece una reivindicación justa del rock australiano del que soy más fan en su vertiente más blues y psicodelíca: Beasts of Bourbon, The Scientits...éstos me los apuntos. Saludos
ResponderEliminarBueno, en Australia hay mucho y muy bueno, Evánder. Una gozada tenerte por aquí, compañero.
ResponderEliminarYo me quedo con ambas, la de la alta energía y la pantanosa y psicodélica, Antonio; tienes mucha razón, hay que reivindicar todo el excelente rock que sale de nuestros antípodas.
Abrazos.
Del "Transformer" no comenté nada porque quiero hacer una posteo-comentario al respective (clavado como siempre, o al menos para mi ya adelanto y ni qué decir). Y en cuanto a los Rifles... Recuerdo el programa de radio noventero en el que participaba Julià donde los pusieron y escuché por primera vez... High energy garajera de quilates, si señor, que aunque no sea un erudito total en ciernes si los conozco lo bastante bien como para haberme pegado algunos festivales caseros del copón a su voltaica costa. Es el tipo de virajes decibélicos que tanto me agradan de este espacio (mientras escribo pienso por ej: "seguro que Gonzalo ha posteado alguna vez sobre Danko Jones", miro labels y, jaja, ahí está -ole-). Bravo y gran abrazo guzzero Gonzalo... Y qué quien toque bendiga a la inagotable fuente de alegrías que siempre nos resulta, a algunos por lo menos, la enorme cantera aussie.
ResponderEliminarPor cierto, que comenté de todo menos lo que en la entrada se trata (y lo mio no es espesor, son circunloquios de esos que conste -que tiene más sílabas y acojona más-)... Encuriosido que me quedo con esa vertiente reposada, para mí tan insospechada y que hasta ahora desconocía, de esta gente... Esto me merece una búsqueda exhaustiva, Gonzalo. Nuevo abrazo y ahora si que ya estaría la cosa.
ResponderEliminarQué pasa, Guzz, se te echaba de menos. Ya estoy esperando tus palabras acerca de "Transformer". También yo me he pegado "festivales caseros del copón" con el "Roman Beach Party" o el "Beyond Respect". Lo tuyo son las perífrasis (que también asusta, ja ja ja), pero muy enjundiosas y divertidas. En fin, que espero que te guste este disco (si lo quieres, mándame un correo).
ResponderEliminarAbrazos.