miércoles, 5 de septiembre de 2018
Exit Planet Dust
Si la música electrónica mandaba en la segunda mitad de los años noventa, los Chemical Brothers eran quienes la dominaban en aquel periodo. Los tres discos publicados por el dúo inglés entre 1995 y 1999 corroboran una afirmación que el paso del tiempo no ha hecho sino acrecentar. Cargadas de energía, samples y funk psicodélico, las canciones de Exit Planet Dust —primer álbum de Tom Rowlands y Ed Simons— son una apisonadora de sonidos digna y heredera de New Order, Public Enemy, Primal Scream y Kraftwerk que demuestra una madurez y una categoría impropias de un debut. El trabajo con elementos prefabricados —suerte de reciclaje aprendido de su gusto por el hip-hop— y su desarrollo como pinchadiscos en una serie de clubs hicieron que los Dust Brothers —nombre que tuvieron que cambiar por el definitivo The Chemical Brothers— abordaran la producción de su primer elepé con una experiencia importante, las ideas rítmicas y melódicas muy claras y un concepto estético perfectamente definido. Música instrumental tan bella como contundente que solo incumple este axioma (el de instrumental, no el de su hermosura) en Life Is Sweet y Alive Alone, con la presencia de Tim Burgess en la primera y la de Beth Orton en la segunda. Dig Your Own Hole y Surrender ampliarán con coherencia la brillantez e intensidad del grupo británico, y ambos se me antojan igual de imprescindibles, pero los cimientos puestos en Exit Planet Dust se valen por sí solos para demostrar una sensibilidad y un poderío que siguen impresionando al oyente atento y abierto de miras.
Llevo ya varios años metiéndome a ráfagas en la electrónica (tampoco hay que pasarse...), desde su vertiente actual hasta las clásicas grabaciones de los grupos de los 90, aunque debo reconocer que a clase de Chemical Brothers no he asistido todavía (mea culpa) Esto me impide valorar las referencias que comentas para hablar con algo de conocimiento de causa de este su primer LP. No obstante, me sorprende, y me parece muy interesante al mismo tiempo, la mención que haces de Primal Scream (un grupo al que creo conocer relativamente bien), sobre todo por las variantes de funk psicodélico que comentas, estilo que PM emplean en su casi coetáneo "Give Out But Don´t Give Up", aunque para mí no profundizan demasiado en sus posibilidades.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
La de Primal Scream no es tan evidente como las otras influencias, pero me parece que ahí está. Este debut de los Brothers es para no perdérselo, Javier.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy buen disco, aunque yo prefiero los dos siguientes. Me parece un grupo de electrónica muy inteligente y a tener en cuenta, cosa que no es habitual. Incluso el 4º y el 5º son también para tener en cuenta. Abrazos.
ResponderEliminarEl cuarto y el quinto no los he escuchado, Juanjo. A mí el tercero quizá me guste un poco menos, pero, vamos, que son matioes.
ResponderEliminarAbrazos.