Encajonado entre Minor Chords And Major Themes y Pacific Ocean Blues, The One Before The Last (2000) es el álbum español de Gigolo Aunts por haber sido publicado a través del sello madrileño Bittersweet y por abrir con su mágica versión de Chica de ayer. Así es. The Girl From Yesterday traslada al inglés el original castellano de Nacha Pop —clásico incontestable del rock patrio—, manteniendo sus propiedades nostálgicas y románticas en el luminoso tratamiento power pop al que lo somete el grupo norteamericano. Los siguientes cinco cortes se nutren de material previamente grabado que no había visto la luz (a no ser que yo me equivoque). Kay And Michael vive entre MC5 y Big Star y The Shit To Superoverdrive mantiene inflamada la llama high energy con adornos pop. To Whoever echa el freno pero se aferra a la distorsión y la potencia mediante un espléndido trabajo de las guitarras de Dave Gibbs y Jon Skibic y la batería de Fred Eltringham. Sulk With Me es otro medio tiempo energético, si bien su estribillo ahorra en electricidad dejando el rock hueco para el soul. Como alt-country podemos definir lo que esconde Hey Lucky, una canción muy diferente al resto que ya solo por eso destaca.
La media docena de temas que completa el álbum es en realidad un epé de 1997 titulado Learn To Play Guitar y que tuvo escasa repercusión. Kinda Girl es una pieza de canónico power pop a la que se yuxtapone Wishing You The Worst (¡la revancha al poder!), donde el pop convive con el rock and roll de riff primigenio y sonido glam. Sway pasa de los cuatro minutos y medio convirtiéndose en la canción más larga del trabajo. Titulada en principio Slow Grunge, como nos recuerda el bajista Steve Hurley en las notas, Sloe podría pasar por lectura de un tema lento de Nirvana, viola de Jennifer Abel incluida, suavizado y embellecido por los Gigolo Aunts. Rockin' Chair se desarrolla en la línea de Kinda Girl a la espera de que The Sun Will Rise Again cierre en forma de balada para recordarnos una obviedad que a los depresivos cuesta ver: a los malos momentos suelen suceder los buenos. Que dicho aforismo tenga su reverso no es menos evidente, pero The One Before The Last concluye su recorrido abogando por la esperanza, así que con ella nos quedamos.
No es la primera vez que oigo hablar de este disco, y la verdad es que me apetece, y no solo por el cover de "La chica de ayer".
ResponderEliminarAbrazos.
Pues merece la pena (y no solo por la versión). Y también los otros discos que cito del grupo, no sé si los has escuchado.
ResponderEliminarUn abrazo, Addi.
No he escuchado nada de ellos, pero buscaré. Gracias.
EliminarAbrazos.
Vagamente acude a mi memoria su versión de "La chica de ayer", apenas la habré escuchado un par o tres de veces y hace mil años además. Creo que el grupo tuvo su puntito aquí en España pero yo no lo cogí, igual que con Inmaculate Fools. Y si al final nos queda la esperanza, pues mejor.
ResponderEliminarAbrazos,
Yo con los Inamaculate Fools nunca me he puesto en serio, a pesar de las insistentes recomendaciones de nuestro querido Juanjo. Sí, los Gigolo Aunts tuvieron su buena parroquia aquí, yo fui parte discreta de la misma. La esperanza siempre, Javier, con lo jodida que es la vida muchas veces…
ResponderEliminarAbrazos.
Les vi en Graná en este época que mencionas y me encantaron. Un concierto precioso ... como si mezclaras a los Jayhawks y a los Posies de aquellos años ... viejuno me hacen sentir estos discos ...
ResponderEliminarPues yo nunca llegué a verles en vivo, J, una pena. Bueno, lo de viejuno no pasa a todos los que nos vamos acercando a la cincuentena.
ResponderEliminarUn abrazo.
En su día lo escuché bastante pero luego creo que perdió fuelle en mi interior. Me gustaría recuperarlo para ver qué me parece actualmente. Abrazos.
ResponderEliminarA mí me parece que sigue mereciendo la pena, pégale una nueva escucha.
ResponderEliminarAbrazos.