lunes, 30 de marzo de 2020
The Police Live!
El disco en vivo que no había visto la luz cuando el grupo todavía estaba activo lo hizo en 1995 en forma de doble CD que casi llegaba a las dos horas y media de duración. Y ambas galletas presentan diferencias notables. La primera recoge a The Police en Boston el 27 de noviembre de 1979, a la sazón un trío pletórico que acaba de publicar Regatta de Blanc. Solo con escuchar los tres primeros cortes (Next To You, So Lonely y Truth Hits Everybody) se hacen evidentes la energía y la capacidad técnica de Stewart Copeland, Andy Summers y Sting, aunque luego Walking On The Moon, Hole In My Life, Bring On The Night o The Bed's Too Big Without You vayan a traer los matices sonoros y de intensidad pertinentes. No faltan, claro, los que hoy en día son clásicos de los setenta (Message In A Bottle, Roxanne y Can't Stand Losing You), pero que en ese momento tienen como máximo un año de vida. Entre unas y otras canciones brilla —arde— el peculiar estilo de la banda británica, suma de punk rock, new wave y reggae, bien juntos o por separado.
El segundo compacto trae a los autores de Outlandos d'Amour en la gira de presentación de su último elepé, Synchronicity, el 2 y 3 de noviembre de 1983 en Atlanta. The Police se halla al borde de la extinción y su música es más abiertamente comercial (las tres coristas ocasionales no ayudan demasiado). Sin embargo, sigue siendo un grupo que merece la pena en directo, pues la garra instrumental no ha desaparecido y Copeland continúa tirando del carro —compás exacto lleno de adornos que embellecen la función rítmica principal sin menoscabarla— con su exuberante percusión. Las composiciones ejecutadas son inferiores a las del concierto de Boston y solo cinco coinciden, incluido el popurrí de Can't Stand Losing You y Reggata de Blanc. Si el comienzo con las dos variaciones (I y II) de Synchronicity y el final con So Lonely son realmente enardecedores (al igual que otros momentos de ambas actuaciones en la capital de Georgia), la conjunción de Wrapped Around Your Finger, Tea In The Sahara, Spirits In The Material World y King Of Pain supone la parte más soporífera, los Police menos estimulantes, jugando a ser adultos ajenos al espíritu pop e inmediato de su arte; a pesar de que interpretativamente se puedan rescatar detalles espléndidos, entre el rock progresivo y la new age patinan nuestros tres hombres. Hecha esta (importante) salvedad, Don't Stand So Close To Me recoge el testigo de De Do Do Do, De Da Da Da (Zenyatta Mondatta al rescate) y hace que el lapso erróneo y cuatripartito pase a mejor vida hasta que la ya dos veces mentada So Lonely cierre la función. Función de menor interés que la de cuatro años atrás, en definitiva, que sirve para conocer la evolución de una banda que hizo historia en un periodo relativamente breve.
Los vi en directo en el entonces estadio del Moscardó, ya finalizando un verano de los 80 (?), con un cartelazo de lujo que incluía a Pretty Things y XTC. Apenas tengo recuerdos del bolo salvo que me quité la camisa y, a pecho lobo, quise epatar a unas pollitas que andaban cercanas. No me comí una rosca, faltaría decirlo. Police me gustaron mucho, en ese momento, ahora, cuando los escucho, lo siguen haciendo. Summers y Copeland son dos grandes músicos, la trayectoria anterior de ambos es rica y provechosa. La imagen de Sting, recalcada como uno de los protagonistas en esa "Quadrophenia" de tan grata memoria, reforzó el toque de la banda.
ResponderEliminarCreo que, quitando a Fischer Z, ninguna otra formación del momento, hizo tan buen reggae blanco.
Abrazos,
Ese concierto es mítico, Javier. Sí, Summers y Copeland (en especial el segundo) son dos pedazo de músicos y Sting (con Police) un gran compositor, un trío perfecto. Nunca me he puesto con Fischer Z, así que me fío de tu criterio. De lo de tu pecholobada mejor no digo nada…
ResponderEliminarAbrazos.
NO he escucchado este directo pero lo haré, me parece interesante la evolución aunque evidentemente el primer periodo interesa mucho más como bien dices.
ResponderEliminarAbrazos.
Para observar la evolución de la banda es un disco perfecto, pero para disfrutarla a fondo el primer CD es el que realmente interesa.
ResponderEliminarAbrazos, Addi.
buenos buenos
ResponderEliminarmejor los principios
a ver, a mi el concierto de Boston me parece de lo mejor, una banda en su mejor momento y con los discos primeros bien recientes. Y del de Atlanta... ufff qué buenos eran, se ve la evolución como músicos y en el año 1983 tenían el estadio de los Atlanta Hawks lleno hasta la bandera, eran muy grandes.
ResponderEliminarAbrazos.
Asi es, Julius.
ResponderEliminarCreo que en líneas generales estamos de acuerdo, Savoy, fueron grandes hasta el final pero los primeros Police son superiores.
Abrazos.