viernes, 10 de mayo de 2013

Rockin' With Wanda!


Amamantada por el country, como tantos jóvenes artistas norteamericanos nacidos en los años treinta, Wanda Jackson dará el salto al rock and roll —alentada por el mismísimo Elvis Presley— absorbida por ese huracán que, en la segunda mitad de la década de 1950, conformará la música popular universal gracias a una generación que apenas recuerda Pearl Harbor o los campos de exterminio nazis y lo único que quiere es acción (sensación de) libertad y diversión. Rockin' With Wanda! (1960), recopilación de singles grabados entre 1956 y 1958 editada por Capitol, es la biblia de la reina del rockabilly (o del rock a secas), hembra seminal donde las haya, capaz de asumir dicho e inevitable oxímoron en un mundo tan apestosamente machista como en el que va a dejar su huella. 

Rock Your Baby y Fujiyama Mama son la inmejorable carta de presentación de un álbum glorioso que suena compacto a pesar de no haber sido concebido como tal. You're The One For Me, que prefigura el Crackin' Up de Bo Diddley, continúa por la senda del rock and roll, aunque menos salvaje, antes de dar paso a la preciosa Did You Miss Me, balada de corazones ardientes y enamorados. Cool Love vuelve a la carga con excelentes solos de J.W. Marshall a la guitarra y Merrill Moore al piano. Sigue Jackson encandilándonos en Honey Bop y Hot Dog! That Made Him Mad con su voz, dulce y chulesca en cada palabra que canta, cargada de la ironía y la convicción de quien ocupa una posición única por ser mujer en un arte recién parido y controlado absolutamente por el sexo contrario. Baby Loves Him y Mean Mean Man son las dos únicas composiciones de la cantante y guitarrista, junto a la mencionada Rock Your Baby, canciones que prueban que también sabe escribir y en las que la banda que le acompaña suena potentísima. Los tres últimos cortes del elepé nos acercan otras caras de Wanda Jackson, pero igual de disfrutables. Viajando a sus orígenes, nos deleita con su amor por el country en You've Turned To A Stranger, se pasa al mambo en Don'a Wan'a y yuxtapone con desparpajo rockabilly, bluegrass y vals en I Gotta Know, coda de un trabajo que suena tan fresco y delicioso hoy como ayer y que el tiempo ha dado la categoría de obra maestra. Que, incomprensiblemente, no se suela citar junto a las de los grandes nombres de aquel despegue solo hace que Rockin' With Wanda! no sea tan conocido como The "Chirping" Crickets o Gene Vincent And The Blue Caps, porque en cuanto se escucha y se conoce, uno cae enamorado de él y lo coloca en el lugar más alto.

4 comentarios:

  1. Sin desmerecer la grandeza de la Wanda, si nos atenemos a la letra de la famosa "Fujiyama Mama" que comentas, nos damos cuenta del lavado mental de la generación americana de la mitad de los 50, algo que también apuntas al principio de la entrada.
    "I´ve been to Nagasaki Hiroshima too
    the same I did to them baby I can do tou you"
    El tema tiene su guasa sexual, pero también está lleno de la prepotencia de los vencedores. Hacer de ese destrozo humanitario un tema tan banal tiene cojones. No creo que Wanda fuera número 1 en Tokyo con esta canción. Lo cual no es obstáculo para decir que es una gran artista.
    Excelente entrada Gonzalo.
    Saludos,
    JdG

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  2. Wanda es maravillosa, aunque no me he empapado a tope de su musica algunas cosas que he escuchado son precisamente de esta época. Que buen ojo tenía Elvis.

    Un abrazo.

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  3. Es cierto que no se cita esta obra al nivel de las otras que todos tenemos en mente, pero hay que reconocer que aquí hay mucha tela que cortar y todo brilla a un altísimo nivel.
    Wanda es muy, muy grande y lo sigue demostrado a día de hoy.

    Rockin' with Wanda...ohh yeahhh!!!

    Salduos.

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  4. Totalmente de acuerdo, Javier. Álvarez Solís habla de la Segunda Guerra Mundial como de un enfrentamiento entre dos fascismos, y no va desencaminado. Yo creo que para los jóvenes norteamericanos sonaba a pasado sobre el que se podía bromear lo que habían sido actos criminales horribles, uno de los más salvajes, encima, llevado a cabo por su propio país. La verdad es que si entrásemos en la ideología de muchos artistas nos perderíamos muchísimas obras maravillosas. Gracias por la de la entrada.

    Este disco es todo él esencial, Lorbada. Elvis sabía mucho, sí.

    Sí, sigue siendo grande, Rockland. El nivel es enorme.

    Abrazos.

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