Tangos o Tangos por Antonio Bartrina y Malevaje. Cualquier título es válido para el debut de Malevaje, la banda madrileña dedicada a recordarnos, entre otras cosas, que no solo de sonidos anglosajones o desarrollados sobre su base vive la música popular. Y lo hacía en 1985 con la máxima de las ambiciones: un mini elepé de escasos veinte minutos dedicado "A la memoria de Carlos Gardel en el 50 aniversario de su muerte", como consta en la contraportada, mediante siete versiones de otros tantos clásicos cantados por el rey del tango (el Elvis argentino, si se me permite la comparación diacrónica). Desde Confesión hasta A la luz de un candil, Bartrina (voz y guitarra española), Ramón Gades (guitarra electroacústica y piano), Fernando Gilabert (contrabajo y coros), Edi Clavo (escobillas y coros) y Virginia Díez (colaborando con sus castañuelas) actualizan con respeto, cariño y elegancia el fatalismo, la sensualidad y la expresividad rioplatenses puestas en escena por Gardel en la primera mitad del siglo XX. El mismo año en que Gabinete Caligari publica Cuatro Rosas, añadiendo elementos del casticismo español a sus orígenes post punk, inicia Malevaje su viaje al pasado musical sudamericano con sus Tangos para traerlos al presente. No parece casualidad que Edi Clavo se ocupara de la percusión en ambos grupos.
¡wow! Gracias por recordar al mítico Antonio Bartrina y a Malevaje. Para son bandasonora de una época de mi vida en el Madrid más canalla de finales los 80 y principios de los 90. Su disco Plaza Mayor es ejemplo de los puentes que existen entre el Madrid mas castizo y el Buenos Aires milonguero. Un abrazo
ResponderEliminarEse Madrid de los últimos años 80 aun mantenía su ambiente canalla, cañí y castizo que, extendido al entorno musical con bandas como Gabinete, Pistones, Coyotes y también Malevaje, aunque estos últimos ampliaran la paleta a la fauna y flora argentina, representaba la pujanza alternativa de los barrios más genuinos, algo ya lamentablemente en proceso de desaparición.
ResponderEliminarAbrazo.
Gracias a ti por pasarte por aquí y comentar, un placer. Yo conocí al grupo a principios de lo noventa, cuando vivía en San Sebastián, una actuación en vivo que me encantó y un estilo musical del que apenas tenía conocimiento. Con la entrada en el grupo de Osvaldo Larrea en "Margot" esos puentes se hicieron aún mas evidentes.
ResponderEliminarCon la gentrificación y la globalización, Javier, toda diferencia va decayendo, cierto. Tú conociste bien aquel Madrid, queda la memoria para revivirlo y el recuerdo de los grupos que citas.
Abrazos.