jueves, 7 de junio de 2012

Not Meant For This World


Ya pasó Asteroid B-612 por Ragged Glory con la intención de dar a conocer a tan inmensa banda, superior a (casi) todas las que en los años noventa practicaron el rock and roll. Si por aquel entonces tratábamos de explicar la majestad de sus dos primeros discos, hoy le ha tocado el turno al que fuera su tercer elepé, Not Meant For This World (1996, Au-Go-Go Records). Todavía con el extraordinario guitarrista Stewart Cunningham  en la formación —músico voraz y torrencial que allí donde aterriza deja su huella, muy implicado también en la composición de los temas de este álbum—, el grupo de John Spittles (o Johnny Casino) se entrega desaforado a electrificar la música del diablo como si no hubieran pasado cuarenta años por ella y le perteneciera. Entre el high energy y el hard rock, Not meant For This World —merendándose a cualquier representante grunge o stoner— exuda crúor a través de sus notas (el vocablo "pasión" se queda corto), cuela retazos atonales en sus himnos sin dejar de mostrarse tan directo como los Sex Pistols o se detiene para emocionarnos con baladas como Thanks For Nuthin', extraídas del territorio Young y Crazy Horse. En tensión constante, la música de Asteroid B-612 no ofrece cuartel físico ni emocional, pero es rica en matices y se beneficia de esporádicas teclas, armónicas o vientos que puntualizan un sonido arrollador. Herederos y copartícipes de la mejor tradición australiana, los miembros del grupo no firmarán autógrafos cuando paseen por las calles, ni quizá formen parte de la historia oficial del rock, pero en el terreno estrictamente artístico dejaron una discografía por la que matarían en Seattle o Estocolmo. Not Meant For This World incluido.

5 comentarios:

  1. Pues sí, un gran e ignoto combo de Rock and Roll.

    Yo, por razón sentimental, tengo más interiorizado el rock escandinavo, pero no cabe duda de qué en las antípodas sabían hacer las cosas cómo Chuck Berry manda.

    "—merendándose a cualquier representante grunge o stoner— "

    Totalmente. Y eso lo hago extensible a muchas otras bandas de la década, cómo Gluecifer, TMGE, The Oblivians, Supersuckers... Me parece que fueron dos movimientos un poco inflados, y dónde, a ojos vista, hay muy poco que rascar, la verdad.

    Rock On!

    ResponderEliminar
  2. No formó parte de tu recomendable trilogía que guardo a buen recaudo y de la que todavía no he podido profundizar lo suficiente. Grandmaster, anoto y abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Instructivo Gonzalo. No conocía de nada la existencia de este banda y por lo que describes (y ajustándolo a gustos personales) creo que me tendría que tapar un poco bastante... A remediarlo para ayer !, y abrazo guzzero.

    ResponderEliminar
  4. Lo que aprendo contigo Gonzalo, no tengo ni idea de esta banda, ya veo que parece recomendable, intentaremos sacar un hueco.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Bastante inflados. El tiempo no está tratando nada bien a Soundgarden, Alice In Chains u otros similares. Su música me parece cada vez más afectada y superflua. Los grupos que citas, por ejemplo, siguen sonando frescos y poderosos.

    Este asteroide será seguro de tu agrado, Johnny, a no ser de que esté yo muy equivocado.

    Es un banda ignota, como dice Tyla, pero espléndida. A mí también me sorprendió cuando la conocí, pero me tuve que rendir a la evidencia, Guzz.

    Lo mismo, Addison. Aprender y compartir conocimiento, buen objetivo para un blog.

    Un abrazo para todos.

    ResponderEliminar