Tras una década de irregulares experimentos, Neil Young publicó en 1990 el sublime y feroz Ragged Glory, para recordar a Sonic Youth, Pixies, Nirvana, Pearl Jam y tantos otros de dónde venía parte de la energía y la inspiración que transmitían sus discos. El riff de Country Home abre como un latigazo un elepé en el que una furiosa electricidad no deja de fluir hasta el último minuto de su más de una hora de duración, electricidad que surge en compañía de Crazy Horse, siempre perfectos para respaldar a Young. Capturados en plena grabación por un gran angular, la portada ya avisa de un grupo ensimismado que bascula, de forma natural (muy lejos de pretensiones o imposturas), entre la inmediatez del garage, la crudeza del punk y la improvisación psicodélica de las jam bands para —entre la decadencia del hard de los ochenta y el advenimiento/consolidación del grunge y la independencia pop— traer desde el pasado un mensaje que si en lo político nunca abandonó a Young en lo creativo parecía haber olvidado durante los años ochenta. Música, en fin, sin concesiones ni aditivos, austera y emocionante, que tendría su continuación en el doble directo publicado un año después, Weld, prolongación en vivo de toda la magia y la grandeza de Ragged Glory.
jueves, 11 de diciembre de 2008
Ragged Glory
Tras una década de irregulares experimentos, Neil Young publicó en 1990 el sublime y feroz Ragged Glory, para recordar a Sonic Youth, Pixies, Nirvana, Pearl Jam y tantos otros de dónde venía parte de la energía y la inspiración que transmitían sus discos. El riff de Country Home abre como un latigazo un elepé en el que una furiosa electricidad no deja de fluir hasta el último minuto de su más de una hora de duración, electricidad que surge en compañía de Crazy Horse, siempre perfectos para respaldar a Young. Capturados en plena grabación por un gran angular, la portada ya avisa de un grupo ensimismado que bascula, de forma natural (muy lejos de pretensiones o imposturas), entre la inmediatez del garage, la crudeza del punk y la improvisación psicodélica de las jam bands para —entre la decadencia del hard de los ochenta y el advenimiento/consolidación del grunge y la independencia pop— traer desde el pasado un mensaje que si en lo político nunca abandonó a Young en lo creativo parecía haber olvidado durante los años ochenta. Música, en fin, sin concesiones ni aditivos, austera y emocionante, que tendría su continuación en el doble directo publicado un año después, Weld, prolongación en vivo de toda la magia y la grandeza de Ragged Glory.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Joder Gonzalo, compartiendo tu sabiduria rockera desde el 2008 y me acabo de enterar ahora... madre mia como pasa el tiempo¡. Menos mal que los viejos rockeros nunca mueren y algunos siguen buscando su corazon de oro.
ResponderEliminarFrom Mallorca with love and rock
Agustin
¿Agustín? ¿Mi antiguo compañero de piso en la capital? Joder… Un fuerte abrazo. Y gracias por poner el primer comentario en mi primera entrada.
ResponderEliminarQué recuerdos.
Hombre, gracias a tí por este maravilloso blog del que me he hecho fan acérrimo. Que grandes recuerdos me trae a mi también. Y como soy un poco "jetas", por aquí te hago unas sugerencias para tus futuros posts, jeje. Ahí van: Beastie boys, Prodigy, Bo Didley, Jackie Wilson, Sly and The Family, Dr.John, la "space music" de Miles Davis y ... los murales de Txema Aznar. :)
ResponderEliminarun abrazo, cuidate y
Who will save rock and roll??
Ja ja ja ja, el mural de Aznar. Tengo escaneada una foto que le hizo Rosana. Joder, qué recuerdos, macho. Y gracias a ti por seguir el blog. Me he fijado en que los dos seguimos el blog de Lou Rambler, que también es de tu tierra, si no me equivoco. En cuanto a tus sugerencias, tomo nota, aunque de Miles Davis ya he comentado cuatro discos, míralo en la lista de etiquetas. Por cierto, que pronto voy a hablar de los Dictators y la maravillosa canción que mentas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Adios... Don Gonzalo... pues yo diría más... este disco no sólo tiene Country home, Fuckin' up es demoledora, pero Love and only love es puro y duro Neil Young acompañado de los Crazy Horse.
ResponderEliminarComo se nota amigo, que al principio hacíamos las entradas más cortas y luego nos vamos soltando.
Un abrazo.
Hombre, se agradece un comentario en la Edad de Piedra de Ragged Glory. No, no sólo tiene "Country Home", por supuesto, ya digo que es "un elepé en el que una furiosa electricidad no deja de fluir hasta el último minuto". Las que citas son extraordinarias, claro, pero quizá mi favorita sea "Over And Over". Y, sí, nos vamos soltando, o eso espero.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, qué alegría me has dado.