Un instrumental escrito por el percusionista Mike Carabello, Singing Winds, Crying Beasts, inicia una liturgia esotérica que van a corroborar, sin solución de continuidad, las soberbias versiones del Black Magic Woman de Fleetwood Mac y el Gypsy Queen de Gábor Szabó, conformando ambas un solo tema. Las percusiones de Carabello y Chepito Areas, la batería de Michael Shrieve, el bajo de Dave Brown, el teclado de Gregg Rolie y la guitarra de Carlos Santana ponen en pie un entramado de rock ácido, ritmos latinos y jazz de mucha originalidad, belleza y vigor. La lectura del Oye cómo va de Tito Puente es una delicia de gozoso e imparable ritmo que hará universal la composición del neoyorquino, y en la que sobresale el rol solista del órgano de Rolie y las seis cuerdas de Santana. Incident At Neshabur, escrita por Santana y Alberto Gianquinto, completa la primera cara mediante otra pieza únicamente instrumental en la que Gianquinto además aporta su piano.
Escrito Se A Cabo, Se acabó —en correcto castellano— es un tema de Areas encargado de encabezar la segunda mitad de los surcos. Cantada y compuesta por Gregg Rolie, Mother's Daughter, se acerca al rock pesado vía Jimi Hendrix, gimiendo distorsionado el instrumento de Santana cual émulo del creador de Are You Experienced. Samba pa ti, tercer y último corte sin vocalista, es un original de Carlos Santana pensado para su lucimiento, cerca de cinco minutos donde saborear su magnífica técnica. Hope You're Feeling Better repite el esquema, el cantante y el autor de Mother's Daughter con resultados igualmente espléndidos. Una miniatura de Areas, con la percusión y la voz de Rico Reyes (que ya hemos escuchado en Oye cómo va), finiquita un trabajo que, a la par que hijo del momento al que pertenece, exhibe una personalidad enorme y arrebatadora que le diferencia de lo que le rodea, precede y obviamente influye.
Autor de la portada de Bitches Brew, que también ve la luz en 1970, el cuadro de Mati Klarwein que pone imagen al plástico y la cita de Herman Hesse en la contraportada —el título de Abraxas está extraído de Demian— acentúan el carácter pagano y psicodélico del álbum, la obra maestra de un grupo en absoluto estado de gracia a situar a la altura de All Things Must Pass, Led Zeppelin III, Fun House, American Beauty, Cosmo's Factory, Paranoid, John Lennon/Plastic Ono Band, Free Your Mind And Your Ass Will Follow, Sunflower, Loaded y, por supuesto, el ímplicitamente citado Stage Fright. Un año de gloria para el rock and roll, para la cultura popular y para uno de sus más conspicuos representantes: Santana.
Una auténtica maravilla de disco, de portada, de música, de sensaciones, que entraban todas ellas además a la primera audición/visión. Si me hubiera gustado asistir a Woodstock sería por ver la actuación de Santana (también la de Sly & The Family Stone, y Ten Years After, los grandes triunfadores del megaconcierto). Tuve que retirar el saludo (temporalmente) a un amigo que teorizaba sobre el "ad nauseam" que le provocaban esos trabajos que de tan escuchados (hasta en los supermercados...) habían perdido buena parte de su significado y valor, y ponía como ejemplo, entre otros (el "Second Helping" de Lynyrd Sknynyrd...) este "Abraxas". ¡Que extraordinaria añada la del comienzo de década!
ResponderEliminar¡Abraxas!,
JdG
Un disco magnífico. Nunca me había fijado en Santana hasta que alguien me regaló este vinilo. La fusión de ritmos latinos, psicodelia, rock progresivo, jazz etc... es mágica y totalmente equilibrada. Un disco icónico.
ResponderEliminarComo siempre lo cuentas como nadie.
Abrazos.
Bueno, en todo caso algunas de las canciones de dichos trabajos. ¡Vaya tres actuaciones las de Woodstock que dices! Y, sí, un disco soberbio.
ResponderEliminarSeguramente la obra maestra de una banda genial, Addi. Y gracias por lo que me toca.
Abrazos.