Como su título especifica, One Night Stand sale de una noche en los Glebe Studios de Sidney en julio de 1986 en la que Cyril Jordan y George Alexander (ayudados por Jack Johnson y Paul Zahl, guitarrista y baterista, respectivamente, de los olvidados Yanks) resucitan a los Flamin Groovies siete años después de Jumpin' In The Night. Si bien estamos ante un disco no obligatorio y cargado con el lastre de una producción inflada típica de la época, a mí personalmente me gusta escuchar en el mismo paquete la revisión de I Can't Hide, Shake Some Action, Slow Death y Teenage Head (cuatro canciones de tal calibre que es imposible arruinar y representativas de diferentes facetas y periodos de los Groovies) y las versiones de Barry Mann y Cynthia Weil en manos de Paul Revere y los Raiders (Kicks), Hoodoo Gurus (Bittersweet), Berry Gordy y Janie Bradford vía Barrett Strong (Money), The Who (Call Me Lightning), Larry Williams (Slow Down) y Freddy Cannon (Tallahassee Lassie). No cambia la carrera de los autores de Flamingo o Flamin' Groovies Now ni altera la historia del rock, pero es innegable que One Night Stand contiene diez temas intrínsecamente espléndidos que, propios o ajenos, nos hacen disfrutar una vez más del grupo californiano.
Si señor, magnífico disco serie B (sin que signifique desmérito alguno) para un disco editado aquí por los añorados amigos de DRO. Lo compré de segunda (?) mano en alguna Feria del Disco y le tengo especial cariño. A parte de lo que comentas, me sirvió para ir completando la colección de una banda imborrable, genial.
ResponderEliminarAbrazos,
Sí, lo de DRO tuvo mucho mérito, Javier. Los Groovies son geniales, como dices, e incluso en este disco se disfruta de ellos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Le tengo un cariño especial porque fue de los primeros que escuché y me agencié, aunque no sea de mis más favoritos. Abrazos.
ResponderEliminarEs un disco claramente menor, pero no por eso es malo.
ResponderEliminarUn abrazo, Juanjo.
A pesar de ser un rendido fan de los Groovies, este disco lo he pinchado poco, aunque como dices la nómina de canciones es irresistible.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, esos temas no pueden fallar, Jorge.
ResponderEliminarUn abrazo.