jueves, 2 de abril de 2015
Toys In The Attic
Suena a excusa y dejadez el eterno sambenito de clones de los Stones cuando uno se para a escuchar con atención un disco como Toys In The Attic (1975). A mediados de los setenta, Steven Tyler, Joe Perry y compañía se hallan en un momento sumamente inspirado, y su afán de crecer e investigar va a quedar plasmado en un disco tan espléndido como su tercer trabajo, en el que, sin dejar de estar presentes sus influencias, Aerosmtih demuestra ser una banda versátil, curiosa e independiente de sus fuentes primarias de inspiración.
Toys In The Attic descorcha la botella literalmente, nada de metáforas, pues la canción es un balazo hard que recorre volando su camino hasta Uncle Salty, donde sigue mandando el rock duro, aunque a menos revoluciones y con algo de boogie en su interior. Dos temas redondos, sea como fuere. Más boogie es el que contiene Adam's Apple, lúdica y picante adaptación del famoso mito bíblico. Walk This Way es una de las mejores, más famosas y originales canciones de los autores de Get Your Wings. El pegajoso funk rock de la estrofa, el perfecto riff de guitarra, el irresistible estribillo, el solo final de Joe Perry: todo se conjunta para dar con un tema ya clásico capaz de revolucionar cualquier fiesta. Swing y rock and roll se alían en la versión de Big Ten Inch Record (Fred Weismantel) antes de que, tan especial como Walk This Way, Sweet Emotion exija su puesto como cima del elepé. Lógico que así sea: su psicodélica introducción, su peculiar cadencia y sus imparables guitarras rítmicas y solistas la hacen merecedora de dicho trofeo. No more No more es un estupendo rock and roll que huele a Richards y a Berry, sí, pero también a Bad Company y Mott The Hoople, y del que Boston —grupo paisano de Aerosmith— aprenderá bastante. De tempo lento e influjo zeppeliano, Round And Round sería el corte más largo del disco de no ser porque el siguiente, You See Me Crying, le supera en unos segundos. Qué tiempos aquéllos en los que el quinteto norteamericano hacía baladas en las que la dignidad y la comercialidad no estaban reñidas, como es el caso de la canción sentimental que culmina Toys In The Attic con la misma brillantez con la que había comenzado; corroborando, pues, que estamos ante la obra maestra de uno de los grupos más insignes y creativos surgidos en los años setenta. Norteamericano para más señas, de criterio propio, e injustamente acusado de copiar a Sus Majestades Satánicas por los morros de su cantante y principal compositor.
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Es cierto que el -por otra parte estupendo- debut de los bostonianos era deudor de los Stones pero de ahí a acusarles de clones siempre me pareció una exageración. Ya en el siguiente -Get Your Wings- teníamos a una banda desarrollando con brio su pesonalidad (esa mezcla de r'n'r, R&B, hard, funk, swing). Y ya si hablamos del que tan estupendamente reseñas hoy o de mi favorito (Rocks), pues ya es un grupo alcanzando la categoria de clásico... creo yo...
ResponderEliminarAbrazos
Yo ya dije que para mi este disco es muy muy bueno, y de los mejorcito de los 70 y fui vapuleado por ello por los tótems de la blogosfera, lo que hizo que lo defendiese todavía más.
ResponderEliminarAbrazos.
Totalmente de acuerdo, Agente, lo veo como tú. Yo prefiero éste a "Rocks", pero por décimas.
ResponderEliminarRecuerdo tu reseña y las reacciones, Savoy, sabes que opinamos lo mismo acerca de "Toys In The Attic".
Abrazos.
"Toys in the Attic" fue mi primera compra de los bostonianos, no hace mucho tiempo. Típico grupo que oía y oía desde sus primeros tiempos pero del que nunca me animé a comprar nada. En un viaje reciente de mi hija a Boston me ha traído el "Get Your Wings" y ya voy, poco a poco, recuperando a un grupo que considero muy significativo e importante en su época. Y, dicho al hilo del comentario de la clonación Aerosmith con Rolling Stones, prefiero al morritos Tyler (y a su hija...) que al Jagger (que me cae rematadamente mal).
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Aerosmith son muy grandes. Una lastima que se hayan cargado su prestigio a base de las ridiculas baladas que todos conocemos. Ahora, donde este "Crazy" que se quite todo lo demas: una de las grandes baladas de rock and roll que se han hecho, digna de los Skynyrd y Stones mas inspirados. Discazo el que nos traes, y precisa entrada!
ResponderEliminarEn los setenta es cuando graba Aerosmith sus mejores obras —entre ellas las dos que tienes—, pero luego todo lo que publica el grupo hasta "Get A Grip" es muy aprovechable. No quedamos directamente con la hija de Tyler, Javer, je je je.
ResponderEliminarYo también incluyo a "Crazy" entre esas baladas espantosas, Aldo, ahí no estamos de acuerdo. Discazo "Toys", claro que sí.
Abrazos.
Aquí también un fan de Liv Tyler... como no, su padre cada vez parece más una mujer sesentera.
ResponderEliminarAbrazos.
Del aspecto de su padre mejor no hablamos, Savoy…
ResponderEliminarUn abrazo.
Se me había pasado este post, y encima de uno de mis discos favoritos, sino mi favorito de Aerosmith, además tan bien escrito como acostumbras.
ResponderEliminarAbrazo.
También mi favorito, Addison. Las entradas están para eso, para leerlas cuando apetezca o se pueda.
ResponderEliminarUn abrazo.
Este disco y get your wings son fundamentales y da gusto volver a oírlos.
ResponderEliminarDos discos fantásticos, Luis.
ResponderEliminarSaludos.