jueves, 23 de abril de 2020

El ascetismo en el western


Las siete películas del oeste que en un periodo de cuatro años dirige Budd Boetticher protagonizadas por Randolph Scott tienen su máxima expresión en tres de las cuatro escritas por Burt Kennedy: Tras la pista de los asesinos (1956), la primera de todas, Los cautivos (1957) y Cabalgar en solitario (1959), culminación de un trabajo de depuración ascética y desnudez fílmica con la idea de contar breve y sintéticamente historias de venganza y violencia. El cazador de recompensas que esconde un secreto y encarna Scott y el hombre que le persigue (Lee Van Cleef), cada uno en compañía de unas cuantas personas, son retratados mediante un uso formidable del cinemascope y el color, encargados de narrar sus acciones y diálogos con una exactitud cortante que excluya cualquier elemento superfluo de psicología inane o vanidosa contemplación poética. No, aquí se va al grano. Y es justamente de eso de donde nace su belleza, que hay que saber buscar en cada encuadre. La naturaleza desértica que rodea a los varios hombres y una mujer que la recorren tiene una importancia idéntica a la de sus cuerpos —quietos o en movimiento—, como si la aridez del paisaje se traspasara a la cámara de Boetticher y determinase los actos de los personajes —sin subrayar las motivaciones— hasta su inexorable final. Al igual que Jacques Tourneur, Joseph H. Lewis u otros maestros acostumbrados a lidiar con la serie B, Boetticher extrae un enorme rendimiento artístico a las carencias económicas, concibiendo las limitaciones como acicate expresivo ajeno del todo a lo cutre o lo barato. La elegancia de la sobriedad, cual Dasiell Hammett del celuloide, se impone a cualquier otra consideración y guía los planos de este magistral western rodado por completo en exteriores, henchido de coherencia y perfección a pesar de su aparente falta de pretensiones. Lo cual no significa que desdeñemos los otros seis de la serie —jamás— sino que encumbramos este Ride Lonesome (en su lengua original) por las virtudes detalladas.

15 comentarios:

  1. Creo que si te dieras cuenta de lo pedante que eres no escribirías así.

    No es un insulto. Solo un consejo de amigo.

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  2. Borra el comentario de arriba. No sabía como decírtelo. Lo siento por no encontrar la forma.

    Gracias

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  3. Hola, anónimo. No me molesta en absoluto que me consideres pedante, aunque tu consejo no me valga a estas alturas. Es tu opinión y te agradezco que la expreses.

    Saludos.

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  4. Anónimos... Ni caso, Gonzalo. Opiniones en la oscuridad solo hacen daño a los mediocres. Salud.

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  5. Gracias. No, daño ninguno. Lo único que me ha extrañado es lo del "consejo de amigo", pues el consejo no va acompañado de argumento alguno y un amigo no oculta su nombre.

    Un abrazo.

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    1. Se ven del tirón las siete de la serie, Gerardo. Concisas, breves y magníficas.

      Abrazos.

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  7. Pues a ver si le damos una vuelta al Boetticher que creo que no tengo controlado en absoluto. Lo bueno si breve y al grano dos veces bueno ... aunque suene pedante :-)

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  8. Aquí otro pedante. Me voy metiendo poco a poco en la visión de películas durante este cautiverio. Desecho, en principio, los westerns, aunque ha sido un estilo al que nunca le he hecho ascos. Me ha llamado la atención el título de "ascetismo", creo que le va bien a la economía de medios que tuve que enfrentarse Boetticher, y además, en tu texto, queda bien ligado cuando hablas de la conexión entre naturaleza y los cuerpos en movimiento de los protagonistas. Esa reflexión es muy interesante.
    Abrazos,

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  9. sin ser fan de boetticher estas peliculas con randolph scott las encuentro entretenidisimas y que me hacen pasar un rato ameno cuando las veo, yo creo que tras la pista de los asesinos es la mejor de todas , y comentar tambien haces bien en recordar a tourneur con una filmografia esplendida y muy interesante casi toda , aparte que son gustos mios me gustan mas las pelis que hizo el inexpresivo scott con de toth que estas con boetticher que aparte de su mejor pelicula la ley del hampa no fue un hombre que hiciese tampoco un cine de campanillas , ya se que era mas bien serie b , tourneur lo era tambien y era un maestro
    un abrazo

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  10. Creo que te va a gustar Boetticher, J, y no solo por sus westerns. Pedante o no, ja je je.

    Yo a veces, viendo esta película, he llegado a pensar en Bresson, Javier. La naturaleza marca inexorablemente la película. Veo que no soy el único pedante, ja ja ja.

    "Tras la pista de los asesinos" fue la primera y ha tenido siempre a su favor la crítica tan favorable que le hizo André Bazin, pero a mí "Cabalgar en solitario" me parece, como mínimo, igual de buena. No estoy de acuerdo en tu valoración de Boetticher, Santi, me parece un cineasta magnífico. "La ley del hampa" es una gran película, pero no tiene el grado de perfección de "Ride Lonesome" en mi opinión. Coincidimos en el amor por Tourneur, sin duda

    Abrazos para todos y gracias por vuestras aportaciones.

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