Expeditivos e inmediatos. Así son los primeros Kinks cuando enchufan las guitarras y en 1964 plantan la semilla del hard, el high energy y el garage rock con esos dos tremendos sencillos llamados You Really Got Me y All Day And All Of The Night. Till The End Of The Day y su cara B (Where Have All The Good Times Gone) vendrán al año siguiente aportando similar energía y construcción e inolvidables melodías, clásicos del rock and roll que formarán parte asimismo del tercer elepé de la banda (The Kink Kontroversy) y fin de una etapa que dará paso —pop costumbrista y barroco mediante— a la más gloriosa y decisiva de los ingleses. Especialmente resplandecientes, los dos minutos largos de Till The End Of The Day, con esa guitarra autoritaria que anuncia el tema, respiran la misma autenticidad y pureza de las perlas seminales de Little Richard, Buddy Holly, Elvis Presley o Eddie Cochran Un poquito más larga que su compañera, Where Have All The Good Times Gone se cuece en aguas casi idénticas, aunque un pelín más lentas y sin el solo de guitarra de Dave Davies que vivifica la cara A. Dos canciones magníficas, en todo caso, que nunca dejarán de sonar en los platos o reproductores de los amantes de la mejor música.
Uf. Colocar una portada de los Kinks en un blog es como dejar una bolsa de caramelos a la puerta de un colegio: allá vamos todos corriendo.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, los Kinks son los padres del garaje. Los Sonics por ejemplo se reconocían discípulos suyos, y afirman que les cambió la vida cuando escucharon "You really got me" en la radio del coche: "Casi nos salimos de la carretera", decían. Y los idolatrados Doors llegaron a copiar la esencia de "All day and all of the night" para hacer su "Hello I love you".
Esas canciones que citas son grandes, muy grandes. Resulta sorprendente que un grupo sea capaz de crear al mismo tiempo piezas como esas y luego otras como "Waterloo sunset", por ejemplo, que a los poppies nos arrebataban. Hay que ser especiales para conseguir esa dualidad. Y por eso, aunque parezcan los primos pobres del Olimpo, están en él junto a Beatles, Stones, Who y demás familia. A su altura.
Saludos mil.
Ja ja ja, muy bueno lo de la bolsa de caramelos (y es verdad, la entrada está teniendo bastantes visitas). Siempre se cita a los Sonics como padres del garage, pero está claro que los Kinks y su "You Really Got Me" dieron el pistoletazo de salida. ¡Cuántos grupos (como los Doors) han imitado a los hermanos Davies! Es increíble esa capacidad de la banda, como dices, para cambiar de registro y ser influencia de cosas tan diferentes como Van Halen y Belle And Sebastian.
ResponderEliminarUn abrazo, Rick.
Escuchando ahora mismo el "Skunk (Sonicly Speaking)" del "High Time"STOP Intento encontrar un nexo de unión entre esta pieza de MC5 (con su variante experimental de big-band jazzística) y los temas del single de Kinks.STOP ¡Ah!... "plantan la semilla del hard, el high energy y el garage rock con esos dos tremendos sencillos", ahí puede que se encuentre la calve.STOP En definitiva, todo depende de la hora en que se escuche la música.OVER
ResponderEliminarAbrazos,
De las semillas surgen árboles frondosos como mi canción favorita de mi disco favorito de los MC5, Javier. La influencia de los Kinks (y de los Sonics) en nuestros ruidosos favoritos no hay que ponerla en duda.
ResponderEliminarAbrazos.
Esta tendencia tan en boga hoy de hablar de bandas sobrevaloradas o infravaloradas me trae siempre a la memoria a The Kinks, nunca percibo en el plano general que se ponga en valor su obra, siempre hay excepciones como RAgged Glory por supuesto. Padres de varias cosas los primeros Kinks.
ResponderEliminarAbrazos.
Yo creo que más de uno lo hace por epatar, querido Jorge, ja ja ja. En cuanto a los Kinks, yo mismo tengo que hablar más de ellos, pues son un grupo excepcional.
ResponderEliminarAbrazos.
Este single es oro puro en ambas caras. Abrazos.
ResponderEliminarTú sí que sabes, Juanjo.
ResponderEliminarAbrazos, amigo.