Sentada en un banco
de la Quinta de los Molinos.
Ojos arrebatadores,
ligera inseguridad,
el amor gestándose.
Años de experiencia
perdidos en una mirada,
en un movimiento.
Pelo negro,
clase obrera,
rock and roll y simpatía.
El control aprendido
hecho añicos de golpe
por la química.
Sensación de déjà vu,
esperanza, miedo, deseo:
incertidumbre.
Ilusión o cinismo:
¿Quién ganará una batalla
que ya se está disputando?
En esa hermosa batalla que se disputa más vale que no haya vencedores ni vencidos. Que se siga produciendo durante el máximo tiempo posible para mantener la llama de tan dulce confrontación.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Ojalá, Javier, pero los caminos del amor son siempre… Mejor no sigo.
ResponderEliminarAbrazos.
¡Qué bonito!
ResponderEliminar¡Qué bonito!
ResponderEliminar¡Gracias, Alicia! ¿Eres la Alicia (nocturna) que yo creo?
ResponderEliminarUn beso.
Hacia tiempo que no me emocionaba al leer. Estaría toda la vida escuchandote.
ResponderEliminarMuchas gracias, de verdad.
ResponderEliminarUn abrazo.