lunes, 17 de febrero de 2020
Where The Action Is!
Where The Action Is! (1999) ha quedado como uno de los plásticos más olvidados de los maestros del garage rock de Rochester, pero viene a demostrar que ni en su momento menos inspirado hizo las cosas mal el grupo de Greg Prevost y Andy Babiuk. En efecto. Trece versiones y cuatro originales del quinteto son llevados a consenso sonoro por los Chesterfield Kings en un álbum que, sin entrar en comparaciones con obras anteriores o hacer una enmienda a la totalidad que entienda el subgénero como reiterativo si no alcanza el sobresaliente, se deja escuchar realmente bien. Los temas propios se funden con facilidad con los de Electric Prunes, Standells, Spiders, Hollies, Kinks, Yardbirds y demás, mérito que no se puede banalizar adjudicándolo exclusivamente al hecho de que las composiciones de los Kings sean fundamentalmente de inspiración sixtie. No: es una banda que hace las cosas con clase y personalidad. Además de la voz, la armónica, las maracas y la pandereta de Prevost y el bajo, la guitarra acústica y el sitar de Babiuk, las guitarras eléctricas de Jeff y Ted Okolowicz, el órgano del primero y la percusión de Mike Boise (todos a los coros) realizan un trabajo sólido y brillante, dotando de cohesión y potencia a un conjunto que, al final, ofrece la (buena) ración de garage que uno espera de los Chesterfield Kings. Aunque la de Where The Action Is! sea poco recordada dos décadas después de su nacimiento, no sería justo quitársela de encima por ello. Action, Action, Action, ¡y a mover el esqueleto!
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Se que andas metido últimamente con los Electric Prunes, banda seminal a la que habría que reivindicar más a menudo. Su influencia, entre otras que mencionas, en esta gente de Chesterfield Kings, no la podré yo en cuarentena, menos aun cuando de estos tipos apenas tengo más noticia que la de su pertenencia al revival garaje de los 80, movida de la que soy muy aficionado. Por tener algo suyo, ¿que me recomendarías?
ResponderEliminarAbrazos,
Su segundo disco, "Stop", es un clásico del garage ochentero, Javier, pero te voy a recomendar aparte sendos homenajes del grupo a los Stones ("Let's Go Get Stoned") y a los New Yotk Dolls ("The Berlin Wall Of Sound"). Y, sí, he estado muy liado con el primer disco de los Electric Prunes, influencia que siempre ha acompañado a los Kings.
ResponderEliminarAbrazos.
Eso es ejemplo de lo oldie y cool.
ResponderEliminarMe alegra que te gusten los Kings, Alexander. Oldie pero no old fashioned.
ResponderEliminarSaludos y gracias por comentar.
Me gustan los Kings, van mucho conmigo desde luego, pero es cierto que este disco está olvidado, yo mismo lo tenía en el olvido, pero lo recuperaré.
ResponderEliminarUn abrazo
Seguro que te gusta, Addi, sé que tú eres mucho de garage rock.
ResponderEliminarAbrazos.