jueves, 28 de abril de 2022

Jump For Joy

Rinde homenaje Cannonball Adderley al musical de 1941 de Duke Ellington en esta grabación llevada a cabo el 20 y 21 de agosto de 1958, es decir, mes y medio después de haber registrado el magnífico Portrait Of Cannonball. Si en éste es un quinteto el que fabrica un hard bop sobresaliente, en Jump For Joy una orquesta de diez miembros dirigida por Bill Russo (con quien Adderley ya había colaborado) reinterpreta los temas escritos o vinculados al rey del jazz.  Son el saxofonista de Florida y el pianista Bill Evans nexo entre y uno y otro trabajo, bien diferentes ambos, por cierto. La revista de Ellington hecha por negros en un país que está punto de entrar en guerra contra alemanes, japoneses e italianos no pierde su significancia social y política diecisiete años después, pues la población afroamericana sigue siendo discriminada. Teniendo eso presente, se nos ofrece una buena ración musical en la que a un sexteto más o menos habitual (saxo alto, trompeta, piano, guitarra, contrabajo y batería) se incorporan dos violines, viola y chelo para dar un toque retro al elepé. No consiguen las cuerdas ni los arreglos de Russo —aun interesantes demasiado invasivas— situarse a la altura de las intervenciones de un Cannonball cuyas improvisaciones son los mejor de un trabajo curioso en el que podemos escuchar temas tan conocidos como I Got It Bad (And That Ain't Good) o Brown-Skin Gal (In The Calico Gown) junto con otros más oscuros del entorno de Duke Ellington. Recomendable, digamos, pero no obligatorio.

2 comentarios: