La que primero había sido banda de acompañamiento de Santi Campos en el disco del que recibirá el nombre —Amigos imaginarios—, se convertirá en grupo con entidad propia que compartirá créditos con el autor de Pequeños incendios en el magistral El invierno secreto. De ahí a que Campos ceda todo el protagonismo, dos años y un álbum, el no menos excepcional El maestro de Houdini (2008), primer trabajo, pues, de los Amigos Imaginarios.
Como es habitual en Campos desde los tiempos de Malconsejo —es decir, a lo largo de toda su carrera—, cada detalle se intenta cuidar al máximo partiendo de composiciones muy trabajadas lírica y melódicamente. La energética Chistes raros corrobora lo dicho e indica el camino a seguir.
"Soy quien cuenta eso chistes raros
que no te hacen reír,
soy quien cruza la acera asustado
cuando te ve venir",
canta Campos recordándonos su retraimiento mientras su guitarra y la de Ester Rodríguez, la batería y la pandereta de Sebastián Giudice, el bajo de Jesús Montes, los "ruidos varios" del coproductor Brad Jones y los pianos acústico y Rhodes y el Hammond de Charlie Bautista redondean con sus arreglos la canción. Jayhawks y Teenage Fanclub son referencias evidentes de Disco del mes, espléndido medio tiempo del que podemos destacar la percusión de Giudice y los coros de Rodríguez y Bautista dentro de un conjunto exquisito. El pop y el bluegrass se combinan —contenidos y elegantes— en Aprendiendo a volar, donde la sonoridad la marcan el banjo de Charlie Bautista y las guitarras española y acústica, respectivamente, de Santi Campos y Ester Rodríguez. El tema que da título al compacto es una tensa balada característica de Campos en la que canta versos tan tristes y honestamente cobardes como:
"Te quiero y no sé cómo demostrarlo,
prefiero escapar,
se me da bien huir,
Houdini a mi lado era un aprendiz".
Idea que se repite en Lobos e insectos ("No quiero saber / qué es lo que me hace ser así"), si bien esta vez acelerando el ritmo, añadiendo arpegios de la guitarra eléctrica y endureciendo el sonido en general. Como contraste, El invierno secreto II (la primera parte está en el disco homónimo), maravilla acústica que lleva dentro al Neil Young más recogido y en la que se hacen esenciales las notas del piano de Bautista. "Una educación católica se titula así en honor a Teenage Fanclub" —influencia ineluctable de Campos—, rezan las notas de cuadernillo que acompaña al CD. Pues así, homenajeando al grupo escocés, se nos habla de esa lacra formativa que tantos y tantos hemos sufrido en España, aunque
"No, no quiero arrastrar
esa cruz nunca más,
no habrá ni una víctima más
de lo que hice y lo que no…".
Charlie Bautista lleva el peso de los arreglos en el tema, al tocar nada más y nada menos que piano, Hammond, Nord Electro, theremin, metalófono y ruidos. La cadencia naíf y luminosa de Un buen día halla a Jesús Montes al contrabajo y Santi Campos al banjo, quien hace de la negatividad virtud:
"Así que intentaré
no pensar
cuándo y cómo
va a acabar".
Bautista y Sebastián Giudice matizan el clásico pop rock de De mudanza con su preciosismo instrumental, mientras que la voces de Campos y Ester Rodríguez se complementan. Si Una educación católica se la debemos a los autores de Grand Prix, "Hora de cerrar es culpa de Tom Waits", o así lo aseguran los Amigos Imaginarios. Y con razón: el eco de Waits está en las maneras de la despedida del trabajo:
"Nunca puedo dormir
si recuerdo quién soy.
Sé que puedo seguir viviendo
si logro olvidar
mi nombre una vez más,
una noche más",
son algunos de los versos de la canción que completa un disco sobresaliente del más reciente rock hecho en este país, cantado en la lengua de Miguel Delibes y cuya escasa difusión habla sin cortapisas del patético panorama cultural español, en este caso el de la música popular. Producido por el mencionado Brad Jones, Dani Richter y el mismo grupo, no dejen pasar el 2015 que acaba de llegar sin echarle un oído a El maestro de Houdini. Quedarán embelesados.
No conozco a esta gente, Gonzalo. Pero este magistral texto invita, sin duda alguna, a su escucha inmediata.
ResponderEliminarEnhorabuena por el post. Feliz Año. Un abrazo!!
Totalmente de acuerdo, Gonzalo. La carrera de Santi está abarrotada de grandiosas miniaturas y preciosos homenajes a la melancolía, tan propia de esa música americana que a algunos tanto nos gusta. Injusto es que no goce de más respaldo por parte de esta frívola prensa musical nuestra.
ResponderEliminarUn abrazo y más truenos!!!!
Pues ni idea de este grupo, Gonzalo pero te haremos caso, de hecho estoy ahora escuchando "Disco del mes" y suena de fábula (esos coros y ese órgano!!!). Además me llaman mucho la atención los versos que compartes en la reseña (perfecta, por cierto).
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Evánder. Sabiendo de tus gustos, creo que Amigos Imaginarios te va gustar mucho. Feliz año.
ResponderEliminarPues gracias por completar con tus palabras la entrada, Marce. El lugar que ocupa Campos en la prensa musical es mínimo, no tiene sentido alguno.
"Disco del mes" es una canción maravillosa, Agente. Las letras son también muy buenas, hablamos de un disco mayor, ya verás. Gracias por lo de la reseña.
Un abrazo para los tres.
Gonzalo,
ResponderEliminarSoy J.Serena; simplemente agradecerte tu interés por Atila (y, sí, estoy de acuerdo con tus comentarios en Desdelaciudadsincines; nada que ver esta novela con la anterior).
Tus padres estuvieron en Walden, el 26, y les agradezco mucho el detalle; y sigo también la pista de tus asuntos con interés (me interesan más los temas literarios que los musicales, pero también he entrado aquí alguna vez, y me parece que tienes un espacio muy interesante).
Perdona por esta intrusión en este blog sin tocar temas musicales (no tenía otra forma de contactar contigo); espero que tengamos también libro tuyo nuevo pronto (leí Stoner hace poco en Baile del Sol, de hecho, y es uno de mis mejores lecturas de 2014).
Y espero que estando también metido en asuntos literarios pronto tengamos ocasión de coincidir.
Un abrazo y mucha suerte con todo,
JS
Pues si, yo también necesito embelesarme este año, como ningún otro quizás. Y esta propuesta, desconocida, promete y mucho. No quisiera decirte que me haré con el disco después de leer tu magnífica entrada, seguramente te mentiría. Me quedo con las palabras, los versos de las canciones que comentas y, cómo no, con el pescozón terrible que supone el no dar, habitualmente, cabida a propuestas nuestras que, en muchos casos, superan con creces a las foráneas.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Un placer tenerte aquí, Javier. Tengo muchas ganas de leer "Atila", precisamente mi madre se lo está leyendo ahora. Espero publicar un libro de relatos este año, ya informaré. A ver si nos vemos un día. (En mi perfil, en la barra lateral, tienes mi correo electrónico.)
ResponderEliminarEn este caso es así, Javier: "El maestro de Houdini" vale más que toda la discografía de U2 junta, por ejemplo, pero, claro, los Amigos Imaginarios ni cantan en inglés, ni son amigos de Bill Clinton. Gracias por lo de la entrada.
Abrazos.
Amigos Imagianrios eran buenísimos. En directo me enamoraron y sus discos son joyas. Muñecas Rusas es mi favorito. Para estos días de frío es fenomenal. Tengo entendido que Santi Campos dejó el mundo de la música. No sé si es cierto, pero de Amigos Imaginarios no sé mucho más salvo que sus músicos son reputadísimos y requeridos allá donde van. Abrazos.
ResponderEliminarDisfrute mucho con el Invierno Secreto, y me quedé con ganas de más; tu post me ha devuelto a la memoria a estos Amigos Imaginarios y sus magníficas letras. Voy a seguir tu consejo y le echo una oreja...saludos y feliz año, un placer pasar por aquí.
ResponderEliminar"Muñecas rusas" es una delicia, Víctor Hugo, me alegra que te guste. Creo que Santi Campos ha dejado de tocar en directo, pero no lo tengo claro. Navegaré un poco a ver.
ResponderEliminar"El invierno secreto" me parece uno de los mejores discos de lo que va de siglo, sin exagerar. Seguro que "El maestro" te encanta, Antonio. El placer es mío, feliz 2015.
Abrazos.
Disfruté este disco cosa fina ! Pop clásico de orfebre que, como ya apuntas por ahí arriba, hubiera sido el tocamiento para un sindiós de cantar esta gente en el idioma de Lennon. Una pena. Recuerdo llevarlo en el mp3 y ponerlo compulsivamente y, curioso, recuerdo también agenciarmelo a la par con un disco de Manos de Topo que no me gustó demasiado pero me hacía descojonarme cosa fina con esas letras, voces y tal... y después me sentía culpable: son los putos Cure pero en castellano ! (y yo, se confiesa sin problema, soy bastante de los Cure -y que Robert Smith tampoco sería Flaubert precisamente, yes...-). En fin, perdón por el desvío, que tampoco veo como añadir nada sobre este muy buen trabajo a tu reseñón por otro lado... Y abrazo con Feliz 2015 included, Gonzalo !
ResponderEliminarLa verdad es que "Houdini" es una gozada, mejor aún si cantado en castellano. No conozco a Manos de Topo, Guzz, pero siempre son bienvenidos tus excursos. Pues gracias por lo del "reseñón", feliz año y un fuerte abrazo.
ResponderEliminarUna chica con la que tuve un rollo me habló de este grupo (del que ella era fan absoluta) donde andaba por ahí Charlie Bautista, así que como no llegó a pasarme nada de ellos (estábamos a otros menesteres) pues los tengo pendientes. Me lo anoto.
ResponderEliminarAbrazos.
Buen gusto (musical) tu amiga. Charlie Bautista hace en este disco un trabajo buenísimo.
ResponderEliminarUn abrazo, Savoy.
Un artículo dedicado a AMIGOS IMAGINARIOS se merece algo más que un miserable comentario ―lo que voy a hacer yo―. Soy fan de Santi Campos desde que publicara dos "pequeñas" preciosidades a nombre propio; lo que vino después ya ha sido una Puta Obra Maestra detrás de otra: "el Invierno Secreto", "EL MAESTRO DE HOUDINI", "Muñecas Rusas", "Museo de Reproducciones" y... . Es cierto, Amigos Imaginarios decidieron hace un tiempo quitarse de en medio, el desánimo estaba más que justificado, lo entiendo pero no lo puedo compartir, no nos los merecemos pero el castigo es demasiado duro. Sólo puedo añadir que con motivo de la gira de este disco, tuve la oportunidad de verlos abriendo para The Posies y... me gustaron muchísimo más que los americanos y que cuando las letras son tan buenas como las de Santi y la banda es capaz de hacer maravillas convirtiéndolas en versos de canciones (tan difícil de hacer con cualquiera de las lenguas latinas), que canten en español no es más que un motivo añadido a rendirles devoción.
ResponderEliminarUN ABRAZO!
Un comentario muy bienvenido, Coco. "Pequeños incendios" y "Amigos imaginarios" son espléndidos, pero es cierto que a partir de "El invierno secreto" el salto es brutal. Los Posies son buenísimos, pero los AI en nada les envidian. Esperemos que vuelvan a juntarse y nos regalen algún disco más. Que canten en castellano es un placer para los que lo tenemos como lengua.
ResponderEliminarOtro abrazo para ti.