Como si hubieran sabido que aquélla iba a ser su última obra maestra, los Rolling Stones tiraban la casa por la ventana para fabricar un espectacular doble elepé en el que caben muchas músicas y todas están tratadas con gusto. Exuberante y rotundo desde el principio hasta el final, Exile On Main St (1972) es uno de los discos definitivos de la historia del rock, imprescindible para conocer su devenir y su gloria en la misma medida que Highway 61 Revisited, Pet Sounds, Forever Changes o Abbey Road.
El rock and roll abonado al hony tonk, el boogie-woogie, el blues (propio o tomado prestado a Slim Harpo y Robert Johnson y aliado con el rock), el boogie rock, el riff stone untado en góspel, el bluegrass, el country, el folk y la balada hecha de soul y góspel refulgen mediante interpretaciones deliciosas de composiciones soberbias. Porque si Mick Jagger y Keith Richards han hecho los deberes de escritura, en el estudio se desatan la pasión y el talento de ambos, Mick Taylor, Bill Wyman y Charlie Watts —el quinteto definitivo de la música del diablo— y las aportaciones puntuales pero imprescindibles de vientos (Bobby Keys y Jim Price), teclas (Nicky Hopkins, Ian Stewart y Billy Preston) y otra serie de artistas que traen consigo contrabajo, marimba, pedal steel, piano o coros, y entre los que destacan Gram Parsons y Dr. John.
El contexto histórico de la grabación, iniciada tras el famoso abandono de Gran Bretaña por motivos fiscales, es conocido de sobra y se puede resumir en tres vocablos: Francia, drogas y caos. Pero, en sí mismo, no explica la calidad de los sonidos salidos de aquellas extrañas sesiones. En diferentes condiciones y lugares, los Stones habían producido Beggars Banquet, Let It Bleed y Sticky Fingers, trabajos previos que les habían asegurado la corona rocker y de los que Exile On Main St. es heredero lógico y privilegiado. Una banda en el mayor estado de forma cuya personalidad arrebatadora nunca volvería a rayar a la altura que aquí demuestra. Sí, Goats Head Soup, It's Only Rock'n Roll y Some Girls serán muy buenos discos, mas nunca los cuatro definitivos que culminaba —multiplicado por dos— este monumento poliédrico que hemos glosado lo mejor posible.
Algunos pensamos que si lo hubiesen dejado aquí su carrera habría sido casi perfecta. Pero en fin, tampoco soy yo el más indicado para decir nada, porque les tengo bastante manía.
ResponderEliminarSalud y suerte para el año que viene. A ver si salimos pronto de esta situación miserable en la que estamos metidos.
Está claro, Rick, que las grabaciones posteriores al "Exile" poco aportan en comparación. Muchas gracias, lo mismo para ti, a ver si en 2021 empezamos a ver la luz (y dejamos de ver las mascarillas).
ResponderEliminarUn abrazo.
El que escribe quisiera lucir canas pero la alopecia no se lo permite. Eso quiere decir que cuando se edito este disco era un teenager. Aun recuerdo las criticas negativas aquellos dias.
ResponderEliminarQue si le sobraban canciones, tenia mucho relleno, que un disco solo hubiera quedado mejor ...
Pasaron los años y el disco pues mejoro como el vino.
Creo que ayudo a esta mejora la posterior obra de los Rolling (opinion tan personal como discutible que acabo con el Black and blue y luego cayo el "brillo" de los discos).
El disco original llevaba una serie de postales en blanco y negro de lo Rolling siendo ametrallados como si fueran unos mafiosos de Chicago. Lo que daria por voler a ver esas fotos.
ResponderEliminarRecuerdo en los 90 comprar en una pecera de una gran superficie de nombre frances las K7 de este disco. Me costo encontrar la pareja. Aun las tengo.
Recuerdo perfectamente que después de comprar el disco y escucharlo un par de veces, mi hermano y yo, copropietarios a la sazón de la obra, DECIDIMOS DEVOLVERLO...¡Qué coño es esto, estos no son mis Rolling! (entonces les conocíamos como los Rolling). Acostumbrados a sus singles anteriores, este "Exile...", que de hecho fue el primer Lp que compramos de la banda, nos sonaba demasiado raro, como que no se podía bailar, muy negro, o algo así...., total que lo cambiamos por uno de Donovan.
ResponderEliminarNo pasó mucho tiempo hasta que nos dimos cuenta del error, pero quiero dejar constancia de que no fuimos los únicos que entonces nos quedamos totalmente descolocados con esta obra maestra.
Nota: He leído por ahí que el disco "lo salvaron" en gran parte en los estudios de Los Ángeles donde hicieron gran parte de las mezclas finales.
Abrazos,
Joder vaya cambio. Curiosidad, ¿Que disco de Donovan pillasteis?
Eliminaryo desde que lo empece a escuchar hace años me obsesiono, uno de los pocos discos que tengo que me emociona de verdad , tengo muchisimos y muchas bandas favoritas , pero no es lo mismo que con este pedazo de disco , donde para mi todas las canciones son de una calidad sobresaliente , he llegado a pensar que este es el mejor disco de rock de siempre , y es que en pocos encontramos tanta variedad de estilos , por cierto escucho otra vez tumbling dice , happy , lovin cup o shine a light y vuelto a pensar igual que antaño, ni siquiera white album me produce tal cumulo de sensaciones
ResponderEliminarfueron durante años una prioridad en mi vida la escucha de sus discos y hoy sigo pensando que pocas les hicieron y les haran sombra a los stones y a este discazo donde nada sobra, me dejo de llevar por lo que me gusta este disco , lo siento pero es asi, un primo mio me lo dejo hace mas de treinta años y desde lo tengo en lo mas alto y para mi no hay discusion posible OBRA MAESTRA
yo al contrario que tu opino que some girls es la ultima obra maestra de los rolling pese a que tatoo you para mi sea un disco notable , despues quizas vivieron de las rentas o yo que se
un abrazo
Así es, Luis, el tiempo no hace sino mejorar una obra maestra como la que comentamos. Para mí es "Some Girls" el último disco imprescindible de los Stones. Yo tengo una edición en vinilo que compré en 1989 o 1990 de esas de buen precio que venía sin las postales que comentas. Sin embargo, unos años después, pillé una edición remasterizada en CD que sí traía dichas postales.
ResponderEliminarQué bueno, Javier, cómo cambian las cosas, ¿tú crees que a tu hermano y a ti os faltaba bagaje o fue algo generalizado? Los toques y retoques de Los Ángeles fueron importantes, aunque no sé si tanto como para "salvar" el disco como comentas.
Te entiendo de sobra, Santi, hablamos de un disco descomunal, que aun siendo doble no flojea ni un momento. Yo prefiero el "Sticky Fingers", pero no diría que es mejor que el "Exile". "Some Girls" me parece muy bueno, pero no lo calificaría de obra maestra.
Abrazos.
Pues si, nos faltaba bagaje, en los primeros 70 lo "único negro" que escuchábamos era el soul de la Tamla o Stax, casi nada de blues. Este género nos venía por las bandas inglesas y casi lo considerábamos como original de Inglaterra. Los Rolling eran para nosotros los singles que habíamos comprado antes y en ellos, aunque la raíz blues estaba ahí, primaba más el sonido bailable, rock y/o pop, el toque de Jones, lo hippie y todo ese rollete. Con el paso del tiempo ya te vas metiendo más en harina y entonces es cuando te dabas cuenta del origen negro de gran parte de aquello.
EliminarAbrazos,
Aunque entiendo que aún les quedan discos notables y algún sobresaliente en la recámara, nunca efectivamente volverían a brillar a esta altura, un disco como muy bien dices, heredero del triángulo precedente, eran otros tiempos y los discos alumbrados entonces son inagotables, no como los de ahora.
ResponderEliminarAbrazos.
Creo que todos opinamos más o menos igual, Jorge: independientemente de nuestra valoración de la obra posterior, ninguno de sus elepés publicados tras este doble se acerca ni de lejos a "Exile".
ResponderEliminarAbrazos.